-“Que no me llames barman, cojones, que esto no es América”
-“¿Seguro, Barman?”
-“Ah, es inútil discutir contigo. Qué quieres.”
-“Ponme algo que me suba la moral, que he tenido un día de mierda”
-“¿Lo que yo quiera?”
-“Sí hombre sí, sorpréndeme”
-“Pues tengo aquí una ración… ¡DE AJO Y AGUA! HAAA-Haaa... En serio, no vengas aquí a contarme tus movidas y sal a arreglar tu mierda de vida. Que algunos trabajamos.”
- “Joder, Barman. Has vuelto a dar en el clavo. Me levantaré y me iré a hacer lo que tengo que hacer.”
Y lo que tengo que hacer es ponerme con este blog de mierda, para el cual pensaba que iba a tener que escribir menos al haber más autores, pero como aquí todo el mundo está de exámenes y cosas, al final el que tiene que poner los cojones sobre la mesa soy yo.
Yo, a pesar de que me queda semana y media para estudiar lo que no está escrito (burda mentira, porque sí está escrito. En concreto, serán unos 700 folios, que ya he estudiado dos asignaturas completas. Eh, me he quitado como 300 hojas en semana y media, soy el puto amo).
Por cierto, que nadie se me ofenda, elenco de autores ilustres. Estoy mucho menos enfadado de lo que aparento al escribir esto.
Tras esta introducción de mierda que no tiene nada que ver, vamos al tema.
Hoy os hablaré de un libro. Más que un libro, es una obra maestra. Una jodida obra maestra. A fucking masterpiece, no sé si me explico.
El libro en cuestión es…

BUENOS PRESAGIOS, de Terry Pratchett y Neil Gaiman
Esta charla debe ser leída con esta música.
Panda de degenerados que lee esto, vuestro deber es conocer a ambos dos. Si sólo conocéis a uno de los dos, bueno, vale, tenéis un pase. Si no conocéis a ninguno, es que tenéis un serio problema. Pero serio.
El libro trata sobre la llegada del Anticristo, el Apocalipsis, la lucha entre el cielo y el infierno, etc.
Al menos, ésa es la premisa clave. Todo comienza cuando se supone que el Anticristo debe nacer. En un hospital religioso (no me acuerdo de cómo lo llamaba exactamente), el cual está regido por monjas que en realidad son satánicas (se limitan a seguir a Satán en vez de a Dios, no esperéis crucifijos invertidos ni Black Metal), una de esas monjas tiene que cambiar a un bebé humano por el Anticristo (bebé). Obviamente se equivoca, pero nadie se da cuenta.
Más adelante, el niño al que todos (ángeles y demonios) creen el Anti va siendo “influido” de forma más o menos sutil por los dos bandos, mientras el Anticristo de verdad vive como un chaval normal. Bueno, un chaval normal que a los 10 años recibe un perro del infierno. Al que llama Perro, creo recordar. Y mientras, van pasando cosas extrañas extrañísimas por el mundo.
También hay un ángel y un demonio asociados para que no llegue el Apocalipsis y no se destruya el mundo, un libro de profecías perfectamente exacto, un ejército cazademonios venido a menos, los 4 jinetes del Apocalipsis, y 30000 movidas más.
Obviamente no me voy a poner a destripar el argumento, más que nada porque si tengo que tratar todas las subtramas estoy aquí hasta mañana.
No es un libro precisamente largo (no llega a las 400 hojas), así que en un par de tardes puede estar leído. Eso sí, es una obra maestra. Creo que ya he comentado este punto antes, pero me parece apropiado recordarlo.
Conclusión: Leed, malditos. Que tanto anime y tanto videojuego no pueden ser buenos (y si no, que me lo digan a mí).
Y para los que leen, voy a ser sincero.
Este es el primer libro de Terry Pratchett que leí. También del otro, pero qué cojones, se nota que es más Pratchett.
Ya no espero con ansia el siguiente libro de Canción de Hielo y Fuego (pero lo espero, maldita sea, George RR Martin, como te mueras sin acabar los 7 libros te vuelvo a matar). Ya no voy buscando por las librerías el siguiente de Geralt de Rivia (me espero a que lo compre mi madre, que siempre se queda con ganas de más al leer el último, muahaha). La Dragonlance sólo tiene un personaje interesante (Raistlin, obviamente). Y Drizzt Do’Urden me resulta aburrido hasta la náusea (Artemis Entreri FTW).
Que qué quiero decir con esto: Que a alguien como yo, quien pensaba que la mayoría de los libros de fantasía épica de esta se le quedan ya pequeños, Mr Pratchett me ha dado una lección. Combina filosofía, crítica del mundo real y humor en novelas geniales.
Así que la conclusión es la misma: Leed, malditos, leed.
OK Mr. Pablo tus argumentos me han convencido, sólo tengo una pregunta que hacerte:
ResponderEliminar¿Me lo dejas?
Terry Pratchett es simplemente dios y Neil Gaiman.. bueno, tampoco es que sepa mucho de este hombre (me he leído un libro y visto la adaptación cinematográfica de otro), pero creo que hacen buena pareja, sí sí.
ResponderEliminarEn cuanto al argumento... no es un tópico en sí, pero me parece algo muy visto lo del anticrito y demases (al leer el argumento me he acordado de la película de "el día de la Bestia" ¬¬' Si me leo el libro, no podré quitarme esa imagen de la cabeza...).
Aún así, confío en que lo cuente de la forma en la que sólo Pratchett sabe :)
En teoría le he dejado encargado a mi padre que se lo dé al tuyo, Jota.
ResponderEliminarsi, ya lo tengo, muchas gracias. Lo epezaré la semana que viene o este finde, estoy hasta los "cojines" de estudiar. No puedo ni dormir la siesta.
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