jueves, 19 de mayo de 2011

#democraciarealya, otro punto de vista.

Destacar antes de nada que apoyo completamente las manifestaciones y las concentraciones y acampadas. La gente de este país me ha demostrado que no sólo sabe quedarse en casa tragando mierda, y por una vez, me enorgullezco de ser parte de ello, aunque muy pequeña.


A mí todo este movimiento me parece un poco ingenuo. Antes de que alguien me salte a la garganta, sí, soy perfectamente consciente de que grandes personalidades y gente muy preparada (ojo, que no es lo mismo) apoyan esto. Pero digo que es ingenuo en el sentido de que:

1.- Lo que se propone es muy populista.

Soy consciente de que es difícil estar en desacuerdo con muchas propuestas, pero ahí faltan medidas a largo plazo. Además, muchas de esas medidas requerirían financiación. Y sí, se puede apretar las tuercas a los diputados, pero no se va a sacar todo lo necesario. Y también se puede apretar las tuercas a las grandes economías del país, pero ¿hasta qué punto no impulsaría eso la evasión de impuestos? Esas medidas deberían reforzar la inversión de empresas extranjeras y las infraestructuras, y hacer especial hincapié en la I+D. Y basta con indagar un poco en la polémica actual de Barbacid, que no tiene gran imagen en los medios, para entender de lo que hablo.

Este país necesita mejorar tanto el tejido empresarial como la investigación científica. No se puede vivir media vida de las exportaciones de 3 ó 4 productos o del turismo.

Respecto de algún otro punto, no se puede tener contenta a la mayoría, ya menos a todo el mundo. Esas medidas (aun a riesgo de sonar a FMI) no se sostendrían a largo plazo. Hay que pulir cosas.

Soy consciente además de que este manifiesto es una propuesta, pero no se pueden hacer las cosas a medias. Y esto lleva al segundo punto.

2.- Las manifestaciones, acampadas… etc. no sirven para poco más que mostrar descontento. Eso no va a causar cambios por sí solo.

Me jode, me repatea y me revienta estar de acuerdo con Esperanza Aguirre, pero creo que este movimiento debería ir a las urnas. No a votar, sino como un partido alternativo. Tengamos en cuenta varias cosas. El movimiento va en contra de los grandes partidos, y pide una democracia real (entre otras cosas). Si no apoya a ningún partido, podemos deducir que los que apoyan el movimiento repartirán su voto entre otros partidos minoritarios. Y sabemos cómo es la mayoría en este país: PPSOE. Todos los mitos del voto útil y demás son ciertos e ineludibles. Es decir, aunque este movimiento consiga quitar votantes a estos partidos, seguirán teniendo un gran apoyo, nos guste o no. Si todo ese voto que “redirige” el movimiento fuera a un partido político fundado según las bases que se proponen, realmente podrían aglutinar un gran número de votos. Porque no sólo lo apoyarían los que se han manifestado en toda España, sino muchos otros más que se quedaron en casa.

Y ahí es cuando el movimiento se convertiría en un verdadero grupo de presión. Con presencia en las instituciones políticas se puede tener voto, además de voz. Y es desde ahí desde donde se podrían impulsar verdaderas acciones destinadas a mejorar la democracia. Ahora, que habría que tener en cuenta la oposición de los grandes partidos, porque a ninguno le interesa que, por ejemplo, se modifique la Ley D’Hont. O que se reduzca el sueldo y las pensiones vitalicias a los diputados.


También me gustaría destacar la cara dura de más de un político, que ha querido aprovecharse del movimiento y llevarlo a su terreno. Creo que el único que ha mostrado un poco de dignidad, ha sido un ¿portavoz? de IU (del que no recuerdo el nombre) que dijo que entre los miembros del movimiento había potenciales votantes de IU que no habían logrado captar. Un poco de dignidad, joder.



¿Una conclusión a toda esta parrafada?

Si de verdad nos preocupa este país, hay que empezar a actuar, y no sólo a hacer visible el malestar. El movimiento no es muy amigo de utilizar la política o la democracia tal y como está ahora, pero son la herramienta más viable para provocar cambios. Este movimiento está apoyado por personas perfectamente preparadas para desempeñar un cargo de nivel, no sólo son los 4 internautas cabreados que decía alguno.

1 comentario:

  1. Muy cierto. Hay mucho extremista por ahí suelto que "no acepta entrar en el juego de los políticos". Haciendo una analogía, la tele no cambia de canal si le gritas desde el sofá.

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